vi como un hombre volo sobre mi mientras se le salian las entrañas, hombres calcinados en fosas comunes, ahi es cuando me pregunto, la brutalidad nazi no tiene limites. mientras miraba a mis compañeros heridos gritando de dolor, escuche un kaboom y la vista se me nublo, al despertar estaba en una prision alemana, al verme los soldados de las ss entraron a la celda y me golpeaban sin cesar. despues de eso, despues de 2 meses de golpes y torturas sin fin, me llevaron a un campo de concentración, alli supe, que todo habia terminado, se acabo mi vida termino, pero en la distancia el rugir de aviones aliados, dije dentro de mi estoy salvado, hasta que empezaron a arrojar bombas sobre el campo de concentracion.
Y de nuevo perdi la consciencia, escuche gritos de soldados aliados que luego me llevaron en sus hombros hasta un hospital, donde recobre la consciencia, me encontre con un medico que me atendio, le di las gracias, y el me dijo, cabo usted es un heroe, le pregunte porque, me dijeron que yo habia marcado una señal para que los aliados pudieran encontrarme, me levante y tome mi arma y corri hacia afuera, donde me encontre con algo que yo creia imposible, ante mis ojos estaba el paisaje de Berlin completamente destruido y mis compañeros izando una bandera rusa.
alli entendi que todo habia terminado al fin, y que podia vivir en paz,pero a la vez mi moral estaba por los suelos, toda mi unidad habia caido frente a mi, tampoco podia creer que uno de mis amigos mas cercanos murio en mis brazos, sin yo poder hacer nada al respecto. hasta que vi que habia quedado un sobreviviente de esa masacre en normandia, se acerco a mi nos dimos un fuerte abrazo, alli pude estar en paz porque alguien habia sobrevivido y tenido la misma experiencia que yo, y llore profundamente como un bebe al que le habian arrebatado a su madre pero al fin todo ese sufrimiento por el que pase habia terminado.
podia respirar en paz sabiendo que ningun aleman nos disparararia, luego todos corrieron hacia el borde de el acantilado y frente al paisaje de berlin destruido gritamos: ¡¡Viva la Libertad!! No pude aguantar las lagrimas al llegar a casa y ver a mi esposa de nuevo, el sentimiento era indescriptible, porque creia que nunca volveria.